2020 – 2024
La exposición a metales pesados es un riesgo a la salud pública debido a la potencial toxicidad aguda y crónica en el ser humano, en contextos como la ingesta de alimentos contaminados, exposición a suelos contaminados, inhalación de polvo y el agua contaminada han sido identificados como importantes factores de exposición a metales pesados.
Las personas en riesgo por exposición a metales pesados y otras sustancias químicas constituyen el 31.15% de la población nacional, el equivalente a 11 millones de personas, de las cuales 5 millones son mujeres y, aproximadamente, el 70% es población infantil menor de 11 años.
Se ubican en el total de departamentos a nivel nacional3 (ver Anexo 1); sin embargo, en al menos 16 departamentos, la población está considerada en riesgo prioritario de exposición y en 9 más de la mitad de su población está expuesta a metales pesados en el ambiente. Asimismo, según el Informe N°195-2016/DSA/DIGESA, hay 106 distritos priorizados a nivel nacional para la intervención del sector Salud en la atención de población expuesta a metales pesados, de los cuales Ica, Pasco y Puno tienen más de 10 distritos priorizados. Pese a este panorama, en 2019 se identificó que sólo dos regiones cuentan con planes integrales de atención (Apurímac y Tacna) y cuatro han desarrollado planes de manera parcial (Cusco, Callao, Cajamarca, Puno y Junín).
Así también, al menos nueve (09) departamentos con más de la mitad de su población propensa a desarrollar problemas en salud debido a la potencial presencia de estas sustancias en sus organismos.
La atención a esta problemática, desde el sistema de salud, por su parte aborda la afectación por metales pesados a través de los productos “3043987 – Población informada y sensibilizada en el cuidado de la salud de las enfermedades no transmisibles (mental, bucal, ocular, metales pesados, hipertensión arterial y diabetes mellitus)”, “3043988 – Familia en zonas de riesgo informada que realizan prácticas higiénicas sanitarias para prevenir las enfermedades no transmisibles (mental, bucal, ocular, metales pesados, hipertensión arterial y diabetes mellitus)” y “3043997 – Tamizaje y tratamiento de pacientes afectados por metales pesados”. La misma que en promedio, los últimos 4 años ha destinado S/59,121,282.40 anuales para la prestación de servicios en salud a población expuesta. (Gráfico 1)
El presupuesto designado para actividades de información y sensibilización ha ido disminuyendo los últimos años, mientras que las actividades prácticas de prevención se han mantenido en un margen similar de financiamiento e incluso ha incrementado hacia el año 2024. Por su parte, las actividades de “Tamizaje y tratamiento” han presentado crecimiento paulatino de fondos.
Ahora bien, de los tres productos mencionados, únicamente “Tamizaje y tratamiento de pacientes afectados por metales pesados” corresponde a atención exclusiva a afectados por metales, mientras que de los otros dos productos es distribuidos con otras enfermedades no transmisibles.
En el rubro de “Tamizaje”, por su parte, el promedio de presupuesto asignado es de S/17,387892.60 durante los últimos 5 años. Este presupuesto, a su vez, es ejecutado a nivel nacional por el Ministerio de Salud, el Instituto Nacional de Salud y el Sistema Integral de Salud (SIS); mientras que la ejecución subnacional está a cargo de las Direcciones de Salud entre redes de salud y Hospitales.
A nivel de las regiones (gráfico 2), el presupuesto ha presentado variaciones significativas, desde regiones que ya no reciben presupuesto para atención a afectados como San Martín o un incremento significativo los dos últimos años como Puno. En la gráfica también se puede apreciar el incremento de fondos para tamizaje del año 2022 en las regiones de Cusco, Pasco y Puno, asociado al incremento de presupuesto logrado el año previo por la Plataforma Nacional de Afectados.
En cuanto al seguimiento de gasto presupuestal (Gráfico 3) – analizado a mediados de diciembre de 2024 –, es alarmante identificar que la región Pasco únicamente ejecutó el 34% de su presupuesto, pese a ser una de las regiones históricamente con mayor afectación a la población con metales pesados. O Tacna que tan solo ha ejecutado el 4,7 de su presupuesto anual.
A su vez, regiones como Apurímac, donde la Plataforma dio a conocer casos recientes de afectación a la salud de infantes a causa de metales pesados, tiene apenas el 57,3% de su presupuesto en ejecución. Otro de los casos de seguimiento al gasto presupuestal para una mejor ejecución es Callao, el cual tuvo tres años de subejecución.
Respecto al año 2025, se han presupuestado S/60,064,882.00, los cuales se encuentran distribuidos en S/21,180,958 a gestionarse a nivel nacional, S/38,717,404 a nivel regional y S/166,520 a nivel local. Este monto es un incremento en los fondos destinados para la atención de afectados, priorizando el financiamiento a actividades de prevención.